Eliges el tiempo de exposición, lo eliges con cuidado observando que tan fuerte es la luz, luego el diafragma...Y apretas el botón... el obturador se abre y entra la luz, es tan fuerte que las partículas de polvo brillan, la luz quema los granos de plata, suenan, se mezclan en una sola materia, cada uno diferente a otro, cada uno con con su propia tonalidad...Y es allí... dónde la magia sucede, acabas de inmortalizar la vida, de hacer tangible la emoción, inmortalizar la belleza.Qué romántica que es la fotografía
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